Tengo buenas razones para recomendar este libro que cayó en mis manos no hace mucho. La primera, porqué es una muy buena novela. Segundo, como telón de fondo está nuestro barrio. El mismo en donde tenemos la tienda de lanas pero en la Barcelona de principios de siglo. Justo en el momento en que se abría la Vía Layetana a través de Ciutat Vella, casi a rozar de donde nos encontramos ahora. Es más! en la página 188 aparece un personaje que tiene una cita con una modista… “Ah, ya al día siguiente mismo, a la sastrería La Araña, en la plaza de la Llana, a hacerse un traje a medida.” Se ve que de repente a este hombre le han salido bien las cosas, aunque habrá que ver cuanto le dura. De esta manera el autor va creando situaciones que mezclan las diferentes clases sociales mediante personajes bisagra. Lo que me parece muy interesante e irónico al mismo tiempo. Para ilustrar un poco más la narrativa de La Felicidad transcribo literalmente otro fragmento. Vamos a la página 89, ahora se trata d...